El gobierno de Estados Unidos abrirá en las próximas semanas el mayor centro de detención para migrantes en el país -con un espacio para unas 1.000 personas- dentro de una base militar en Texas.
El centro, que impulsará la campaña de detenciones y deportaciones masivas del presidente Donald Trump, estará ubicado en Fort Bliss, a las afueras de la ciudad fronteriza de El Paso, compuesto por edificios de lona y empezará a funcionar el 17 de agosto, según informó el portal digital Border Report.
Las autoridades planean expandir las instalaciones para detener hasta 5.000 personas, según informó a EFE un funcionario del Departamento de Seguridad de Nacional (DHS).
El gobierno “está buscando todas las opciones disponibles para ampliar la capacidad de detención” dentro de EE UU , detalló a EFE la portavoz de DHS, Tricia McLaughlin, incluyendo también en otras bases militares además de Fort Bliss.
El Pentágono ya ha aprobado el uso de Camp Atterbury, en Indiana y la base McGuire DixLakehurst en Nueva Jersey, al igual que ha continuado el polémico envío de migrantes hacia la base naval de Guantánamo, en Cuba.
Con información de El Diario