El arzobispo de Caracas, monseñor Raúl Biord, afirmó que la canonización de José Gregorio Hernández y Carmen Rendiles podría contribuir a disminuir la polarización que actualmente afecta a Venezuela.
Monseñor Biord sostuvo que las figuras de ambos religiosos poseen la cualidad de trascender barreras y generar unidad nacional, ya que sus vidas constituyen la representación de los mejores atributos del gentilicio venezolano y un ejemplo para que la feligresía aspire a imitarla y mejorar sus valores personales.
“Nuestro pueblo venezolano vive momentos difíciles, de polarización, de conflictos, pero nosotros creemos que es un gran regalo de Dios la canonización de los dos primeros santos. José Gregorio y la madre Carmen atraviesan todas las barreras políticas, sociales, económicas y diría hasta religiosas, porque son el símbolo de lo mejor de los venezolanos”, dijo monseñor Biord en declaraciones a Vatican News.
El arzobispo de Caracas también hizo referencia a la campaña de promoción denominada “Santos para todos”, cuyo objetivo es impulsar tres valores fundamentales asociados a los nuevos santos que inician con la letra “E”: esperanza, encuentro y ejemplo.
El arzobispo Raúl Biord también detalló el encuentro que sostuvo días antes con el papa León XIV, en el que transmitió el saludo y la gratitud del pueblo venezolano por la canonización de sus dos primeros santos.
Para simbolizar este sentir, Biord obsequió al sumo pontífice dos pequeñas estatuas, una de José Gregorio y otra de la Madre Carmen Rendiles como una forma de expresar la devoción de los venezolanos.
“Nos dio la bendición y al mismo tiempo nos aseguró su oración constante por la paz, por la reconciliación y por la prosperidad del bien de nuestro pueblo”, señaló el prelado venezolano.
Por su parte, el obispo auxiliar de Caracas, monseñor Carlos Márquez, manifestó en la misma conversación que los venezolanos albergan la esperanza de ser “verdaderamente felices” al seguir por el camino de la vida de fe, de esperanza y de caridad.
Entre las virtudes que identificó en los dos santos, el obispo auxiliar mencionó la fraternidad, su servicio desinteresado hacia los demás y un amor profundo a Dios y al prójimo sin exclusiones.







