El presidente de Bolivia, Luis Arce, desistió este martes de buscar la reelección en los comicios de agosto, ante el inminente fracaso de su candidatura a causa de su impopular gobierno.
Arce declinó su aspiración de renovar el mandato por cinco años, tras ser proclamado por el Movimiento al Socialismo (MAS), el partido en el poder, a finales de abril. También pidió a Evo Morales que se abstenga de ser candidato,
«Hoy doy a conocer al pueblo boliviano, con absoluta firmeza, mi decisión de declinar mi candidatura a la reelección presidencial», dijo en un mensaje transmitido por el canal oficial Bolivia TV.
Economista de 61 años, Arce tenía las encuestas en contra. Una última publicada a fines de marzo por la consultora Captura le otorgaba 1% de las preferencias electorales.
También planteó «la más amplia unidad de la izquierda» para buscar un solo candidato que compita con la derecha.
El actual presidente fue ministro de economía durante la mayor parte del gobierno de Evo Morales (2006-2019), hoy su mayor adversario político.
El líder indígena, que busca su cuarto mandato, acusa a Arce de orquestar una supuesta persecución judicial en su contra para impedirle postular en las elecciones de agosto.
«Desde aquí lanzo un desafío al expresidente Evo Morales de no insistir en ser candidato a la presidencia, porque constitucionalmente no puede serlo y segundo, porque la fragmentación de voto solo serviría a la derecha”, remarcó.