Tres décadas y las gestiones de tres cardenales y arzobispos de Caracas, desde el inicio del proceso, transcurrieron para lograr la canonización de la Madre Carmen Rendiles la primera mujer, y también religiosa, santa venezolana.
Los trámites para lograr que la monja caraqueña, fundadora de la Congregación Siervas de Jesús en Venezuela, fuera declarada beata y luego santa por el Papa, iniciaron el 1 de marzo de 1995.
Ese día, el cardenal José Alí Lebrún, arzobispo de Caracas, nombró un tribunal delegado para llevar adelante el proceso. Tres días después, designó a una comisión de peritos en historia para que recogieran toda la documentación sobre la Sierva de Dios que había muerto con fama de santidad 18 años antes, el 9 de mayo de 1977.
Esto, tras ser nombrado el sacerdote Romualdo Rodrigo, de la Orden de Agustino Recoletos, postulador de la causa de beatificación y obtener el “nihil obstat” o aprobación del Vaticano.
La llamada fase diocesana comenzó el 9 de marzo de ese mismo año y se desarrolló a lo largo de 52 sesiones en las que fueron interrogados 40 testigos en un tiempo aproximado de 20 meses, indica la página web de la causa.
Casi 12 años más tarde, a inicios de 2008, Rodrigo renunció por motivos de salud y la abogada argentino-italiana Silvia Correale, la primera mujer postuladora de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, aceptó sustituirlo a finales de 2009.
Beata por un primer milagro

En 2009, con la colaboración del sacerdote Gerardino Barracchini y el apoyo del cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo de Caracas, se inició el estudio de los posibles milagros concedidos por Dios a través de la intercesión de la Madre Carmen Rendiles, entre ellos la presunta curación de la médica cirujana caraqueña Trinette Durán de Branger.
La amiga de las Siervas de Jesús sufrió en 2003 una descarga eléctrica en su brazo izquierdo mientras realizaba una intervención quirúrgica, que le causó un dolor permanente e incapacitante.
El 5 de julio de 2013, el papa Francisco anunció el reconocimiento a las «virtudes heroicas” de la religiosa y el otorgamiento del título de “venerable”.
En febrero de 2014 se inició una etapa diocesana de investigación del supuesto milagro a Durán de Branger que concluyó el 18 de septiembre de ese mismo año, refiere la página web de la causa
Y el martes 19 de diciembre de 2017, el pontífice argentino aprobó, tras el visto bueno del presunto milagro a la doctora por las comisiones de médicos y teólogos, y por la plenaria de cardenales de la Congregación para las Causas de los Santos, la promulgación del decreto por medio del cual se declaró beata a la Madre Carmen Rendiles.
“Como ella nació sin un brazo, quiso curarme el mío”, afirmó la médica cirujana, al saber que la monja se convertiría en la tercera venezolana en alcanzar el honor de los altares nacionales, después de las también religiosas María de San José y Candelaria de San José, por su curación milagrosa «instantánea, perfecta, estable y duradera», ocurrida el 18 de julio de 2003. Nació sin su brazo izquierdo.

En una ceremonia festiva y multitudinaria, realizada en el Estadio Universitario de Caracas, el sábado 16 de junio de 2018, el cardenal Ángelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, enviado especial del Vaticano, la proclamó beata y decretó su fiesta el 9 de mayo, día en el que falleció en 1977.
Santa por un segundo milagro
Posteriormente, el 2 de marzo de 2019, se cerró la fase diocesana de un presunto segundo milagro que convertiría a Madre Carmen Rendiles en santa, tras el trabajo realizado por un tribunal eclesiástico de la Arquidiócesis de Caracas, encabezado por el sacerdote Barracchini, entonces párroco de La Candelaria y vicario episcopal de la Santidad.
Se trataba de la curación milagrosa, atribuida a su intercesión, de una joven caraqueña de 18 años, según informó Panorama. Fue lo que único que se informó entonces.
Se trataba de un hecho milagroso que tuvo lugar después del 16 de junio de 2018, dado que, para llegar a la santificación, el referido dicasterio vaticano examina un segundo posible milagro que haya sucedido en una fecha posterior a la beatificación, siguiendo, además, los mismos pasos del primero,
El cardenal Baltazar Porras, entonces administrador apostólico de Caracas, entregó el “dossier” a la Congregación para la Causa de los Santos, en el Vaticano, el 25 de mayo de 2019, para dar inicio a la fase romana del proceso.
Y el pasado 31 de marzo, el papa Francisco aprobó el decreto del milagro por el que se declaró la canonización de la Madre Carmen Elena Rendiles, quien se convertirá en la segunda santa venezolana, después de que el 25 de febrero se anunció la santidad del médico trujillano José Gregorio Hernández.
El Vaticano reveló entonces que el segundo milagro por la intercesión de la monja caraqueña, aprobado por las comisiones de médicos y teólogos, así como por el pleno de cardenales, fue la “curación milagrosa” en 2018 de una mujer a la que en 2015 le fue diagnosticada hidrocefalia triventricular idiopática”.
Aún no se conoce la fecha de ceremonia de su proclamación como santa, ya que el pontífice tendrá que instituir un consistorio para elegir el día, pero el cardenal Porras, ahora arzobispo emérito de la Arquidiócesis de Caracas aseguró que podría realizarse entre septiembre y octubre de este año, junto con la del “médico de los pobres” nacido en Isnotú.
