La Policía brasileña denunció formalmente al centrocampista paraguayo Damián Bobadilla, por el delito de «injuria racial» de carácter xenófobo, contra el jugador venezolano del Talleres, Miguel Navarro, durante un partido de la Copa Libertadores.
Bobadilla, futbolista del São Paulo, declaró este miércoles en una comisaría de la capital paulista bajo la acusación de haber llamado «venezolano muerto de hambre» al lateral izquierdo del conjunto argentino.
Una vez finalizado el interrogatorio, los agentes presentaron cargos contra el internacional paraguayo. En Brasil, la pena máxima prevista por el delito de injuria racial es de cinco años de prisión.
Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública de São Paulo señalaron que las diligencias sobre el caso continúan «para el total esclarecimiento de los hechos».
El incidente ocurrió el pasado 27 de mayo en el estadio MorumBIS durante el encuentro entre São Paulo y Talleres, correspondiente a la sexta y última jornada del Grupo D de la Copa Libertadores.
Navarro, afectado por el comentario, rompió a llorar sobre el césped y amagó con abandonar el terreno de juego. «Nunca me avergonzaré de mis raíces. No hay lugar para el odio en el fútbol. Iré hasta las últimas consecuencias», declaró el defensor, quien interpuso una denuncia en comisaría tras el choque.
Bobadilla, de 23 años, se disculpó ese mismo día en sus redes sociales. Admitió que «reaccionó mal», pero acusó a Navarro de haberlo «ofendido primeramente» y de tratarlo con «un poco de desprecio».
Con información de Efe