Luego de que la niña Maikelys Espinoza llegó a Venezuela y que el Gobierno del presidente Nicolás Maduro agradeció al a su par, Donald Trump, por las gestiones para su regreso, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) respondió y aseguró que la pequeña fue «repatriada por una orden judicial».
«Esta niña estuvo bajo la custodia de la Oficina de Reubicación de Refugiados durante 302 días», explicó el organismo en su cuenta en X.
Textualmente, el post dice: «La niña en cuestión fue repatriada a Venezuela en virtud de una orden judicial. El ICE se remite al gobierno venezolano para determinar si la niña está con su madre o bajo custodia del gobierno, pero al menos sabemos que no estará con su padre, miembro de la TDA».
En este sentido, insiste en que el padre de la menor «dirigía una casa de tortura y supervisaba homicidios, venta de drogas, secuestros, extorsión y tráfico sexual para la banda criminal. Gracias al presidente Trump, este miembro de una banda terrorista está encerrado en CECOT».
Y, sobre la madre, señala: «Yorely Escarleth Bernal Inciarte, supervisa el reclutamiento de mujeres jóvenes para el narcotráfico y la prostitución para el Tren de Aragua. Por su seguridad, no fue trasladada con su madre».