España vive una intensa ola de incendios que dejó, hasta el momento, dos fallecidos, más de 5.000 personas desalojadas, vías ferroviarias cortadas y patrimonios naturales devastados por las llamas que permanecen activas en siete comunidades y que provocaron que el país active la fase de preemergencia.
Regiones como Castilla y León, Galicia (ambas al norte del país), Andalucía (al sur), Madrid, Castilla-La Mancha (centro) y Extremadura (oeste) son las comunidades más afectadas por estos incendios forestales declarados en plena ola de calor que no da tregua desde que inició el pasado domingo 3 de agosto.
Las condiciones meteorológicas para los próximos días, en especial las altas temperaturas, se consideran «desfavorables» para la extinción de los fuegos, al menos hasta el jueves próximo, por las tormentas secas que se esperan y que pueden generar nuevos incendios.
El presidente de España, Pedro Sánchez, aseguró que la situación que vive el país europeo «sigue siendo grave» y agradeció, a través de su cuenta en la red social X, el trabajo que realizan los equipos de emergencia que luchan contra el avance del fuego, además de pedirles precaución en su labor.
Con información de Infobae