El Ejecutivo nacional condenó, “de manera categórica”, este jueves 5 de junio, “un nuevo ataque” contra los venezolanos por parte del gobierno de Estados Unidos, en referencia a la restricción de “la emisión y validez de visas”, “sin justificación alguna y con evidentes fines políticos y de amedrentamiento”.
A través de un comunicado publicado por el canciller Yván Gil en Telegram, rechazó lo que calificó como “campaña de estigmatización y criminalización” por parte de la administración de Donald Trump.
Acusó a Marco Rubio, secretario de Estado del país norteamericano, de estar al frente de “esta operación” y lo tachó de estar “marcado por su conocido odio hacia el pueblo venezolano, que ha hecho de la agresión sistemática su política exterior, contando con el respaldo de la ultraderecha venezolana”.
“Lo ocurrido no es un hecho aislado, sino una nueva demostración del odio visceral contra el pueblo venezolano que anima a quienes hoy conducen la política exterior de Washington”, enfatizó el gobierno nacional en el escrito.
Reiteró su compromiso “indeclinable con la defensa de los derechos e intereses de los venezolanos en cualquier parte del mundo y, ante esta nueva ola de agresiones”,
Y reafirmó la “alerta máxima de viaje” a EEUU con la advertencia que “no garantiza hoy las condiciones mínimas de respeto, trato digno ni legalidad para nuestros ciudadanos”.
El presidente Trump anunció este miércoles 4 de junio la restricción de entrada a venezolanos a EEUU, aún con visa.
Basó la medida en que Venezuela junto a otros seis países, entre los que se encuentra Cuba, tienen una “deficiente” verificación de antecedentes penales.
Venezuela “carece de una autoridad central competente o cooperativa para emitir pasaportes o documentos civiles y no cuenta con medidas adecuadas de revisión y verificación”, afirma la orden ejecutiva firmada por el mandatario republicano, que también acusa al país de haber rechazado “históricamente” a los venezolanos expulsados.
