Nicolás Maduro atribuyó la “mejoría milagrosa” que permitió que el papa Francisco fuera dando de alta del hospital Gemelli de Roma el pasado domingo 23 de marzo a un retrato de San José Gregorio Hernández que le envió recientemente como regalo.
El líder oficialista celebró la noche de este miércoles 26, en transmisión por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV) la salida del hospital del pontífice argentino, de 88 años, tras 38 días hospitalizado por una grave infección respiratoria.
Reveló que el retrato del médico trujillano, cuya canonización fue aprobada por el Obispo de Roma el pasado febrero, se lo envió cuando este estaba ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma.
«El día que le llegó, dice gente que estaba cerca del papa Francisco, empezó una mejoría milagrosa y, afortunadamente, le dieron de alta, salió de esa crisis», expresó Maduro.
En ese sentido, aseguró que el obsequio, junto con la oración del pueblo venezolano, «contribuyó modestamente a que el papa Francisco saliera de esa gravedad».
«Ahí estuvo nuestra oración, nuestro granito de arena humilde y el poder de Dios a través de san José Gregorio Hernández», añadió.
