El desbordamiento del río Orinoco por las intensas lluvias de julio ha dejado hasta la fecha más de 1.500 damnificados, principalmente en los municipios Atabapo y Atures del estado Amazonas, así como en varias comunidades del estado Bolívar.
El gobernador de Amazonas, Miguel Rodríguez, informó a medios locales que los afectados pertenecen a unas 250 familias que ya se encuentran en refugios improvisados. La crecida del caudal del río Orinoco también amenaza infraestructuras críticas como la planta eléctrica de Atabapo, la cual quedó fuera de servicio durante una emergencia similar en 2018.
En Bolívar, específicamente en el municipio Cedeño, fue necesario desalojar por completo la localidad de Puerto Nuevo El Burro, donde las aguas alcanzaron todas las viviendas. Mientras que en Ciudad Bolívar, sectores como La Toma, El Edén y El Almacén permanecen anegados y las familias no disponen de opciones de reubicación inmediata.
Con información El Nacional