Desde este mes de julio, además del costo regular del trámite, el gobierno estadounidense comenzó a aplicar un nuevo recargo obligatorio que incrementa significativamente el precio final de la mayoría de estas visas.
Este nuevo cargo, llamado tasa de integridad, lo aprobó el Congreso estadounidense a través de la nueva ley One Big Beautiful Bill Act, impulsada por el presidente Donald Trump. Se trata de un pago adicional de 250 dólares que se suma a la tarifa que ya se debía cubrir para solicitar una visa de no inmigrante.
Por ejemplo, si vas a tramitar la visa B1/B2, que es la más común para turismo y negocios, ahora tendrás que pagar 185 dólares por la solicitud más 250 dólares adicionales por la tasa de integridad. Esto eleva el precio total a 435 dólares por persona,
Según lo establecido en la nueva ley, la tasa de integridad se actualizará cada año fiscal según el índice de inflación en Estados Unidos, según el medio. Esto significa que su valor podría seguir aumentando en los próximos años, dependiendo de las condiciones económicas del país.
Aunque esta medida genera preocupación entre quienes desean viajar legalmente a Estados Unidos, el gobierno asegura que se trata de una estrategia para reforzar la supervisión de los procesos migratorios y garantizar el cumplimiento de las condiciones establecidas por cada tipo de visa.
Con información de El Nacional